En el año 2000 "Weekend", una tienda de las afueras de Estocolmo que abría únicamente los fines de semana a modo de mercadillo en el que encontrar una multitud de prendas second-hand con formas, historias y estilos diversos pasó de ser un proyecto entre amigos a una de las firmas punteras del denim. EME LONPLIÉ te cuenta la historia de una cenicienta de la moda.
El príncipe de la historia: Karlss Larsson, empresario al que se unieron estos cuatro emprendedores para dar luz a Weekday, una versión diaria de la tienda inicial que mantuvo el concepto de vender ropa de segunda mano a precios adsequibles y muy cool.
Weekday mantuvo sus principios incorporando firmas puntersa y exclusivas.El resultado: Cheap Monday, una marca de vaqueros que respondía a la necesidad de un público que buscaba exclusividad a precios relativamente bajos.
Esta cenicienta se convirtió en princesa y lejos de acabar como el cuento de la lechera paso a presentar colecciones completas en 2004 y 2005, a formar parte de H&M en 2010, y distribuir más allá de las fronteras suecas como firma.
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